Memoria
Cuando plantamos un árbol, en gesto solidario, oxigenamos el pasado, cultivamos memoria; aquella que los censores trataron de arrebatarnos. Cultivamos memoria, proyectamos futuro. Los muertos vuelven a la vida mostrando su rostro a la lluvia. En los aledaños de mi pueblo se yergue un árbol que planté sobre la tierra de los hombres olvidados. La existencia derramada trepa por los vasos hacia la explosión de los ramajes que el nuevo viento mece. Entonces, la memoria nos aguijonea con invisibles aullidos para que ellas no vuelvan a bailar solas. I. A. C. 2 de mayo de 2024